Para huevones, nuestros dirigentes. Solo a un dirigente peruano se le ocurre dejar sin técnico a su equipo a estas alturas del campeonato. ¡Y a qué equipo! Al mejor equipo del campeonato. Al que quedó primero y jugaba mejor. A ese Aurich que pintaba para campeón. ¿Quién le hizo daño? ¿Acaso alguien de afuera o los árbitros? No, su misma gente. Sus dirigentes. Sus tan peruanos dirigentes.
Según Ovación, Franco Navarro dejó el cargo del Aurich por "discrepancias con los dirigentes". De ahí en más no se sabe nada nuevo. Hasta ahora Navarro no ha declarado a ningún medio y todo es una incógnita. Pero lo cierto es que Franco se fue. Se fue luego de que el año pasado salve al Aurich de la baja. Se fue en su mejor momento, sólido de local y temible de visita. Pero al fin y al cabo se fue. No está más y ese equipo que armó podría tampoco estar de nuevo como antes, como cuando él lo dirigía. Ahora se especula que lo reemplazaría el Chino Rivera, pero hasta que se arme un equipo como el que quiere el Chino ,va a tomar tiempo. Y de repente eso le cueste varios partidos, y por ende, puntos que podrían dejarlo sin un campeonato.
A veces uno no entiende qué pasa por las cabezas de los dirigentes. El equipo iba bien, estaba asegurando Libertadores, tenía la oportunidad de retomar la punta, pero lo de siempre: un dirigente cagándola. Esos enternados que no juegan ni arman la estructura de un equipo, pero que siempre aparecen para destrozar lo hecho por el técnico. Ayayay Edwin Oviedo... a la hora que se te ocurre hacer noticia. Ojalá que la gente de Chiclayo no te termine cantando a ti también y a ritmo de cumbia "y hoy te vas, te vas, te vas, te vas".
Según Ovación, Franco Navarro dejó el cargo del Aurich por "discrepancias con los dirigentes". De ahí en más no se sabe nada nuevo. Hasta ahora Navarro no ha declarado a ningún medio y todo es una incógnita. Pero lo cierto es que Franco se fue. Se fue luego de que el año pasado salve al Aurich de la baja. Se fue en su mejor momento, sólido de local y temible de visita. Pero al fin y al cabo se fue. No está más y ese equipo que armó podría tampoco estar de nuevo como antes, como cuando él lo dirigía. Ahora se especula que lo reemplazaría el Chino Rivera, pero hasta que se arme un equipo como el que quiere el Chino ,va a tomar tiempo. Y de repente eso le cueste varios partidos, y por ende, puntos que podrían dejarlo sin un campeonato.
A veces uno no entiende qué pasa por las cabezas de los dirigentes. El equipo iba bien, estaba asegurando Libertadores, tenía la oportunidad de retomar la punta, pero lo de siempre: un dirigente cagándola. Esos enternados que no juegan ni arman la estructura de un equipo, pero que siempre aparecen para destrozar lo hecho por el técnico. Ayayay Edwin Oviedo... a la hora que se te ocurre hacer noticia. Ojalá que la gente de Chiclayo no te termine cantando a ti también y a ritmo de cumbia "y hoy te vas, te vas, te vas, te vas".La canción de la portada
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1 comentario:
Perdieron la punta y perdieron el criterio?... a veces hay una tenue luz, llamese Aurich, que nos hace creer que hay dirigentes que quieren trabajar con seriedad. Pero al primer resbalon, confirman que son mas de "los mismos".
Saludos Julgo.
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